Qué es y cómo visitar el Elogio del Horizonte de Gijón
El Elogio del Horizonte es una monumental escultura situado en lo alto de Cerro de Santa Catalina de Gijón.
Convertida en uno de los símbolos de esta ciudad asturiana, se trata de uno de los lugares más destacados que visitar en Gijón. Y no solo por la escultura en sí mismo, que resulta impresionante, si no también por las visitas que se obtienen desde ella.
Desde luego, podéis visitar el Elogio del Horizonte por libre, ya que solo tenéis que andar unos 10 minutos desde el Barrio de Cimadevilla, que el centro histórico de Gijón. Y, lógicamente, la visita es gratuita.
Sin embargo, merece la pena saber, que algunos de los mejores free tour por Gijón incluyen el Elogio del Horizonte en la visita guiada, de manera que puede resultar una manera excelente de conocerla.
El porqué de la construcción de Elogio del Horizonte
El Elogio del Horizonte es una estructura enorme, de 10 metros de alta y 500 toneladas de peso, construida enteramente en hormigón, un material habitualmente usado por Eduardo Chillida, un artista vasco que se engloba dentro del estilo abstracto del siglo XX.
A Chillida, que ya era un artista famoso en aquella época, le fue encomendada la tarea de crear una escultura o estructura que se convirtiese en emblemática de la ciudad de Gijón.
En aquellos tiempos, el Cerro de Santa Catalina, que se localiza a solo 10 minutos a pie del centro histórico de Gijón, estaba siendo rehabilitado, de manera que la posibilidad de situar la obra en lo alto del cerro, bien visible, fue una posibilidad que se tuvo en cuenta desde el primer momento.
Chillida ya había creado la estructura el Peine del Viento para la ciudad de San Sebastián hacía más de 1 década y esta obra se había convertido en un símbolo de la ciudad. Con este mismo menester se encargó a Chillida que creara la obra emblemática para Gijón, que acabaría siendo en Elogio del Horizonte.
Cómo es el Elogio del Horizonte
El Elogio del Horizonte es una estructura de hormigón de gran tamaño, cuyo proceso de creación resultó algo complicado.
Tras varias maquetas de acero, madera y, la última, de poliestrieno, acabó configurándose una estructura de madera que se ría utilizada como encofrado y que se montó ya en lo alto del Cerro de Santa Catalina.
Hay que tener en cuenta que aunque el Elogio del Horizonte es una obra de Eduardo Chillida, para la creación del encofrado se requirieron los servicios técnicos del ingeniero de caminos José Antonio Fernández Ordóñez, habitual colaborador del artista vasco.
El coste de la obra fue elevado. Más de 1200 millones de pesetas del año 1990 (más de 7 millones de euros), lo que provocó no pocas quejas en distintos sectores de la ciudad de Gijón. Sin embargo, con el tiempo, el Elogio del Horizonte se ha convertido en el símbolo de Gijón.
El diseño es simple, como muchas de las obras de Chillida, consistente en una corona circular, de hormigón armado, que no queda completamente cerrada. De ella parten dos enormes patas que sostienen la corona a unos 10 metros del suelo. Todo ello de hormigón armado. La forma de El Elogio del Horizonte ha dado lugar a que los lugareños conozcan la obra con el váter de King Kong.
Visitar el Elogio del Horizonte de Gijón, en lo alto del Cerro Santa Catalina, resulta obligado en esta ciudad asturiana. Además, desde lo alto de esta suave colina, vais a disfrutar de unas excelentes vistas delos acantilados que rodean la ciudad de Gijón.